El Sofá del Zorro

He ido a vacunar a Ariel y me encontré en el veterinario una señora que llevaba a su chihuaha, que tenía una pata rota llena de clavos, pobrecillo , dentro de un carrito todo terreno de bebé. Pensé: "mira que bien, han aprovechado la capota transparente de los niños para el perrillo".

Lo cierto es que no era un carrito de bebé de verdad, si no un carrito venido directamente de USA. Con unas paredes de plástico que cerraban al minican dentro y lo protegían de las inclemencias del tiempo.

No entro a valorar, pero flipé un poco, bueno bastante, en parte por a lo que da salida el mercado, con lo caros que son los de niños, ni me imagino lo que han de ser para perros, y en parte por la frivolidad de la compra... (Es que algo así yo no me lo puedo permitir). Una vez que se cure el animal, qué haces con el carrito??? Es que con lo rechiquitín que es, no puedes llevarlo en brazos? (Qué pensará el animal???).

Hacemos lo mismo por las personas que por nuestros animales??? Hacemos este tipo de cosas por ellos o por nosotros?

Estoy entre el pavor económico, el alucine mercantilista y la admiración de la idea...